ELE arkitektura . photos: © Aitor Estevez
The commission carried out by San Antonio school has consisted of renovating the main façade of the center, an outdoor playground and access for children between 3-6 years old and finally a cloister / interior playground for children between 0 -3 years. The three interventions are related through pure geometries, unifying the identity of the entire space through elements easily understandable by children.
One of the main ideas of the project focuses on relating the courtyard to its surroundings, while opening a window to the street that allows passers-by observe and access to the center. On the other hand, the designed perimeter closure, unifies the entire complex and opens to the surrounding nature. This metal closure articulates each of the interventions carried out in the courtyard, adapting to the needs of each area. Starting from the street access, it works as a permeable closure to the view, then it becomes a thick wall against the existing party wall along the entire first access section. Introducing geometric volumes into the metal grid, which generate different paths between them, the transit area becomes a place for gross motor game. These volumes create shelter, meeting, passage and play areas. Finally, the closure leads you to the wooden platform area, which is a reflection of the geometrization of nature. The different scenarios designed to encourage children interaction are adapted to their scale, creating places as: the mountain, the cave, the beach…
The intervention in the 18×18 meters long cloister with covered corridors on two of its facades, had two clear objectives. On one side, to fill the high gap between the patio and the two corridors, to create a single diaphanous area and, on the other, to cover the patio for a more rewarding, useful and multifunctional space. The new roof, is integrated into the patio in an almost immaterial way, thanks to the transparency of the material. This cover significantly expands the useful space on rainy days while allows natural light to enter. Taking advantage of the existing 40 cm elevation change, a wooden platform has been built, where circular depressions are created to house different uses for the little ones.
All non-essential elements have been removed from the façade in order to create a new profile that would unify all the different existing volumes. Special emphasis has been placed on creating a relationship between the street and the exterior playground, thanks to the visual permeability of the access.
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El encargo realizado por el centro de educación infantil del colegio San Antonio, ha consistido en reformar la fachada principal del centro, un patio exterior de acceso al centro para niños entre 3-6 años y por último un claustro/ patio interior para niños entre 0-3 años. Las tres intervenciones se relacionan mediante las geometrías puras, unificando la identidad de todo el espacio mediante elementos fácilmente comprensibles por los niñ@s. El Patio Exterior Una de las ideas principales del proyecto se centra en relacionar el patio con su entorno, abrir una ventana que permita al viandante desde la calle observar y dar acceso al centro y por otro proyectar un cerramiento perimetral que unifique todo el conjunto y se habrá a la naturaleza que lo rodea. Este cierre metálico articula cada una de las intervenciones que se realizan en el patio, adaptándose a las necesidades de cada zona. Empezando desde el acceso de la calle, funciona como cierre permeable a la vista, a continuación se convierte en un muro grueso contra la medianera existente a lo largo de todo el primer tramo de acceso. Esta zona de paso, se convierte en una zona de juego motriz, introduciendo en la retícula metálica volúmenes geométricos que generan entre ellos circuitos diferentes. Estos volúmenes crean zonas de cobijo, de reunión, de paso y de juego. Por último, este cierre conecta con la zona de plataformas de madera, las cuales son un reflejo de la geometrización de la naturaleza. Esta, se adapta a la escala de l@s niñ@s de 3 a 5 años, para crear diferentes escenarios que fomenten la interacción de los mismos; el monte, la cueva, la playa, etc. son algunos de estos parajes. El Claustro La intervención en el claustro de 18x18 metros con corredores cubiertos en dos de sus fachadas, tenía dos objetivos claros, salvar el desnivel existente entre el patio y los dos pasillos perimetrales, para crear una única zona diáfana y, por otro, cubrir el patio parcialmente para darle un mayor uso durante el año y que pudiese servir de espacio polivalente. La cubierta propuesta, gracias a la transparencia del etfe, se integra en el patio de forma casi inmaterial. Esta cubierta amplía de forma significativa el espacio útil de los días de lluvia a la vez que permite la entrada de luz natural. Por otro lado, aprovechando el cambio de cota de 40 cm existente, se ha construido una plataforma de madera, donde se crean depresiones circulares que albergan diferentes usos para los más pequeños. La Fachada En la fachada se han eliminado todos los elementos que no sean imprescindibles, para poder crear un nuevo perfil que unificase todos los diferentes volúmenes existentes. Se ha puesto especial énfasis en crear una relación entre la calle y el patio, gracias a la permeabilidad visual del acceso.
