Estudi Biga . photos: © José Hevia
The Horno Pigalle aims to primarily highlight the historical footprint of the old town of Maó. To achieve this, layers added in previous stages have been removed, revealing the history of these walls and bringing their past to the forefront.
In this restoration work, layers added in previous stages have been removed, allowing for the unveiling of the rich historical heritage that lies within these centuries-old walls. This act of revealing the history of the walls not only serves to honor the site’s history but also establishes a bridge between the past and the present, offering visitors a unique opportunity to connect with the local heritage.
In terms of materiality, the project aspires to go beyond mere architectural restoration. The aim is to create a space that highlights the bakery, turning it into a visual and contemplative workshop visible from the street. This approach brings the interior life of the business to the exterior through the inclusion of large windows that enable visitors to sit and observe the process of baking. This transparency encourages a closer relationship between the community and the business, inviting people to be part of the Horno Pigalle experience.
To complement this experience, custom-designed furniture follows a technical approach that ensures the functionality and efficiency of the space. Furthermore, a thoughtful selection of natural materials is used, which aligns perfectly with the bakery’s philosophy. These materials not only add warmth and authenticity to the environment but also emphasize the connection to nature and traditional bread production.
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El Horno Pigalle tiene como principal objetivo destacar la huella histórica del casco antiguo de Maó. Para lograrlo, se han eliminado las capas añadidas en etapas anteriores, revelando la historia de estas paredes y poniendo su pasado en primer plano. En este trabajo de restauración, se han eliminado las capas añadidas en etapas anteriores, lo que ha permitido descubrir el rico patrimonio histórico que se encuentra dentro de estas paredes centenarias. Este acto de revelar la historia de las paredes no solo sirve para homenajear la historia del lugar, sino que también establece un puente entre el pasado y el presente, ofreciendo a los visitantes una oportunidad única para conectar con el patrimonio local. En cuanto a la materialidad, el proyecto aspira a ir más allá de la mera restauración arquitectónica. El objetivo es crear un espacio que destaque la panadería, convirtiéndola en un taller visual y contemplativo visible desde la calle. Este enfoque lleva la vida interior del negocio al exterior mediante la inclusión de grandes ventanas que permiten a los visitantes sentarse y observar el proceso de horneado. Esta transparencia fomenta una relación más estrecha entre la comunidad y el negocio, invitando a las personas a formar parte de la experiencia del Horno Pigalle. Para complementar esta experiencia, los muebles diseñados a medida siguen un enfoque técnico que garantiza la funcionalidad y eficiencia del espacio. Además, se utiliza una cuidadosa selección de materiales naturales que se alinean perfectamente con la filosofía de la panadería. Estos materiales no solo aportan calidez y autenticidad al entorno, sino que también enfatizan la conexión con la naturaleza y la producción tradicional de pan.