IAAC . photos: © Adrià Goula
Located in the Moll de la Fusta, within the Port of Barcelona, the ACCIONA Energía pavilion is a physical and digital platform to engage with millions of visitors. Taking advantage of its modular, lightweight design, the structure can be assembled and disassembled with ease—an ideal trait for ephemeral architecture.
The facility, designed and built by Institute for Advanced Architecture of Catalonia (IAAC), stands out for its avant-garde design that captures the movement of the wind, the circularity of materials and the use of renewable energy. Among the most innovative elements of the structure are the recycled blades from El Cabrito wind farm in Tarifa (Cádiz), one of the oldest in Spain, which have been reused as part of the structure, showing how wind turbine blades can have a second life in new infrastructures.
The use of a natural material such as timber and recycled textiles has meant that the construction of this pavilion has a carbon footprint up to 50 times smaller than if it had been manufactured with traditional materials such as steel, aluminum, plastics and non-recycled textiles. Furthermore, the integration of photovoltaic panels on the roof allows the pavilion to generate its own energy, a gesture of self-sufficiency that reflects the spirit of renewable energy production.
Ecological and Material Innovation
The timber used in the pavilion’s construction comes from sustainably managed forests, with CLT from Xilonor used for the podium and GLAM from Madergia for the main structure. This material palette is not only environmentally sound but also lends the structure a natural beauty and warmth—qualities often absent in conventional corporate architecture. These design choices result in a carbon-negative pavilion, that stores more CO2 than was emitted during its construction.
The emissions generated in the construction of the pavilion are approximately 25 tons of CO2. A figure well below what would have been expected when doing it with other materials such as aluminum, steel, no-recycled textiles and plastic, which would have reached emissions of up to 50 times more.
The pavilion incorporates several strategies that push the envelope of sustainable design.
Reused wind turbine blades
These blades forge a direct link to ACCIONA Energía wind energy expertise while contributing to the circular design by repurposing decommissioned components. They also serve a practical function as part of the facade ventilation system.
Passive cooling
The pavilion’s design maximizes the use of natural airflow from the nearby sea, reducing the need for energy-intensive cooling systems. Facade openings and a raised podium further enhance the cooling effect, ensuring thermal comfort for visitors.
Mass timber construction
The use of carbon-storing timber in the structure—sourced from certified renewable forests—demonstrates how bio-based materials can contribute to reducing the building’s overall carbon footprint. Perhaps the unique element of the pavilion is its ability to record the movement of the wind. The wooden posts on the exterior of the pavilion sway in response to the breeze, creating a dynamic visual spectacle that reflects the movement of the wind turbines. As the wind changes, so does the pavilion’s aesthetic, turning it into a living structure, an expression of the natural forces that drives both yachts and energy networks.
An ephemeral pavilion with a lasting message
In terms of visitor experience, the pavilion operates on several levels. The first floor is a welcoming space with interactive exhibits while offering a cool, shaded respite from the Mediterranean sun. The upper level is reserved for guests and corporate meetings.
Though the pavilion is a temporary installation, it carries a message with lasting impact. Its ecological design principles, use of biological materials, and focus on circularity reflect a vision for the future of architecture—one where buildings are not just structures but responsible actors in the climate challenge. The pavilion’s modularity ensures that it can be reused in future events, furthering ACCIONA Energía goal of sustainable urban development.
_
Ubicado en el Moll de la Fusta, en el Puerto de Barcelona, el pabellón de ACCIONA Energía es una plataforma física y digital para interactuar con millones de visitantes. Gracias a su diseño modular y ligero, la estructura se puede montar y desmontar con facilidad, una característica ideal para la arquitectura efímera. La instalación, diseñada y construida por el Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña (IAAC), destaca por su diseño vanguardista que captura el movimiento del viento, la circularidad de los materiales y el uso de energías renovables. Entre los elementos más innovadores de la estructura se encuentran las palas recicladas del parque eólico El Cabrito en Tarifa (Cádiz), uno de los más antiguos de España, que se han reutilizado como parte de la estructura, mostrando cómo las palas de los aerogeneradores pueden tener una segunda vida en nuevas infraestructuras. El uso de un material natural como la madera y textiles reciclados ha hecho que la construcción de este pabellón tenga una huella de carbono hasta 50 veces menor que si se hubiera fabricado con materiales tradicionales como acero, aluminio, plásticos y textiles no reciclados. Además, la integración de paneles fotovoltaicos en la cubierta permite al pabellón generar su propia energía, un gesto de autosuficiencia que refleja el espíritu de producción de energía renovable. Innovación ecológica y de materiales La madera utilizada en la construcción del pabellón proviene de bosques gestionados de forma sostenible, con CLT de Xilonor utilizado para el podio y GLAM de Madergia para la estructura principal. Esta paleta de materiales no solo es respetuosa con el medio ambiente, sino que también le otorga a la estructura una belleza natural y calidez, cualidades que a menudo están ausentes en la arquitectura corporativa convencional. Estas decisiones de diseño dan como resultado un pabellón carbono-negativo, que almacena más CO2 del que se emitió durante su construcción. Las emisiones generadas en la construcción del pabellón son aproximadamente 25 toneladas de CO2. Una cifra muy por debajo de lo que se hubiera esperado al hacerlo con otros materiales como aluminio, acero, textiles no reciclados y plástico, que habrían alcanzado emisiones de hasta 50 veces más. El pabellón incorpora varias estrategias que amplían los límites del diseño sostenible. Palas de aerogeneradores reutilizadas Estas palas establecen un vínculo directo con la experiencia de ACCIONA Energía en energía eólica, al tiempo que contribuyen al diseño circular mediante la reutilización de componentes fuera de servicio. También cumplen una función práctica como parte del sistema de ventilación de la fachada. Refrigeración pasiva El diseño del pabellón maximiza el uso del flujo de aire natural del mar cercano, lo que reduce la necesidad de sistemas de refrigeración que consumen mucha energía. Las aberturas de la fachada y un podio elevado mejoran aún más el efecto de refrigeración, lo que garantiza el confort térmico para los visitantes. Construcción de madera maciza El uso de madera que almacena carbono en la estructura (procedente de bosques renovables certificados) demuestra cómo los materiales de origen biológico pueden contribuir a reducir la huella de carbono general del edificio. Quizás el elemento único del pabellón sea su capacidad para registrar el movimiento del viento. Los postes de madera en el exterior del pabellón se balancean en respuesta a la brisa, creando un espectáculo visual dinámico que refleja el movimiento de las turbinas eólicas. A medida que cambia el viento, también lo hace la estética del pabellón, convirtiéndolo en una estructura viva, una expresión de las fuerzas naturales que impulsan tanto a los yates como a las redes energéticas. Un pabellón efímero con un mensaje duradero En cuanto a la experiencia del visitante, el pabellón funciona en varios niveles. El primer piso es un espacio acogedor con exhibiciones interactivas que ofrece un respiro fresco y sombreado del sol mediterráneo. El nivel superior está reservado para invitados y reuniones corporativas. Aunque el pabellón es una instalación temporal, transmite un mensaje con un impacto duradero. Sus principios de diseño ecológico, el uso de materiales biológicos y el enfoque en la circularidad reflejan una visión para el futuro de la arquitectura, una en la que los edificios no son solo estructuras, sino actores responsables en el desafío climático. La modularidad del pabellón garantiza que pueda reutilizarse en eventos futuros, lo que promueve el objetivo de ACCIONA Energía de un desarrollo urbano sostenible.