Baile Menduiña . del medio atelier . renders: © Baile Menduiña
The project for the refurbishment and extension of the National Museum of Contemporary Art (MNAC) in Lisbon aims to revitalize this cultural space in the historic Chiado district, an area of significant heritage value. The proposal integrates the historical buildings with a new volume that seeks to balance historical memory with contemporary architecture. This volume respects the historical value of the surroundings, creating visual and functional continuity with the city while incorporating contemporary design elements that establish it as a cultural and architectural landmark.
The structure of the new volume acts as a mediator between the historic buildings, connecting exhibition spaces and circulation areas and enhancing the visitor experience. The base of the building is clad in lioz stone, an iconic material in Lisbon, which lends it a respectful presence rooted in tradition. In the upper levels, rustic ceramic mosaic introduces a modern texture that enriches the building’s visual profile. This material approach reflects a harmony between past and present, allowing the building to be perceived as a natural extension of the Chiado district.
The design organizes the museum tour in a linear system, facilitating circulation and creating a fluid experience in each exhibition area. On the access level, the main lobby connects directly with the sculpture garden, an outdoor space that serves as a transition between the museum and urban life. This garden not only functions as a public area for the contemplation of open-air works but also reinforces MNAC’s role as an accessible cultural centre open to the community. The layout of this garden seeks to integrate the museum with the neighbourhood’s natural routes, reinforcing its connection with the surroundings.
Functionally, the exhibition spaces are arranged to offer visitors a continuous, sequential visual narrative. The permanent exhibition resides on the lower level, while temporary exhibition rooms and the library are positioned on upper levels, establishing a spatial hierarchy that enriches the museographic experience. On the top level, the project includes a longitudinal terrace with panoramic views of Lisbon, providing a symbolic conclusion to the museum tour. This terrace also offers a place for reflection, reinforcing the relationship between the museum, the city, and the river.
To improve sustainability, the facade is designed to optimize natural light, reducing the need for artificial lighting in exhibition areas. Additionally, the building incorporates passive thermal control systems, leveraging the materials’ properties to regulate temperature, which helps reduce energy consumption.
The underground floors accommodate technical and storage areas, ensuring efficient management of collections and operational services. This layout allows for a clear distinction between technical functions and public spaces, maintaining a practical distribution that facilitates staff operations without intruding on the visitor experience. On the ground level, the lobby includes a shop and café with direct access to the sculpture garden, integrating these amenities into the daily life of the neighbourhood and enabling them to function independently. Temporary exhibition rooms feature adjustable lighting and mobile elements, facilitating a flexible, versatile arrangement suited to various exhibition formats, encouraging an interactive and engaging experience.
MNAC is also committed to accessibility. All areas are adapted for people with reduced mobility, with ramps, elevators, and appropriate signage, ensuring an inclusive and accessible experience for all visitors. Additionally, the project incorporates a publicly visible restoration space where visitors can observe the conservation process, adding educational and transparent value to the visit.
The new MNAC design represents a commitment to sustainability and cultural integration in Chiado. This architectural approach allows the museum to remain faithful to its heritage legacy while adopting a vision of innovation and openness toward the future. With a structure that combines functionality, accessibility, and urban integration, MNAC becomes a space where contemporary art and architecture engage with the community and the urban context. This project ensures that MNAC will continue to evolve in harmony with the city, consolidating itself as a cultural landmark where art and architecture come together to enrich each visitor’s experience.
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First Prize Winner of the Public Design Competition for the MNAC Refurbishment and Extension Project
Location: Lisbon, Portugal
Client: Government of the Portuguese Republic
Surface: 8000 m2
Authors:
Baile Menduiña
del medio atelier
Arquitecto Luis Manuel Pereira
Design team (competition):
Rodrigo Baile
Arturo Menduiña
Mafalda Peres Couto
Michel Zeca González
Claudia Silveira
Luis Manuel Pereira
Structural engineer: Edgar Cardoso
Museum exhibition consultant: Heloisa Vivanco
Images:
Baile Menduiña
Competition year:
2024
Status: 1st Prize
El proyecto de remodelación y ampliación del Museo Nacional de Arte Contemporáneo (MNAC) en Lisboa tiene como objetivo revitalizar este espacio cultural en el histórico barrio del Chiado, un área de importancia patrimonial. La propuesta integra los edificios históricos con un nuevo volumen que busca equilibrar la memoria histórica y la arquitectura contemporánea. Este volumen respeta el valor histórico del entorno, creando una continuidad visual y funcional con la ciudad, a la vez que incorpora elementos de diseño contemporáneo que lo consolidan como un referente cultural y arquitectónico. La estructura del nuevo volumen actúa como un mediador entre los edificios históricos, conectando espacios de exposición y áreas de circulación, y mejorando la experiencia del visitante. La base del edificio se reviste de piedra lioz, material emblemático de Lisboa, que le otorga una presencia respetuosa y enraizada en la tradición. En los niveles superiores, el uso de mosaico cerámico rústico aporta una textura moderna que enriquece el perfil visual del edificio. Este enfoque material refleja una armonía entre pasado y presente, permitiendo que el edificio se perciba como una extensión natural del barrio del Chiado. El diseño organiza el recorrido museográfico en un sistema lineal, facilitando la circulación y creando una experiencia fluida en cada área expositiva. En el nivel de acceso, el vestíbulo principal conecta directamente con el jardín de esculturas, un espacio exterior que actúa como un lugar de transición entre el museo y la vida urbana. Este jardín no solo funciona como un área pública para la contemplación de obras al aire libre, sino que también reafirma el papel del MNAC como un centro cultural accesible y abierto a la comunidad. La disposición de este jardín busca integrar el museo en los recorridos naturales del barrio, reforzando su conexión con el entorno. En términos de funcionalidad, los espacios expositivos están organizados para que los visitantes experimenten una narrativa visual continua y secuencial. La exposición permanente se encuentra en el nivel inferior, mientras que las salas de exposiciones temporales y la biblioteca están ubicadas en los niveles superiores, estableciendo una jerarquía espacial que permite una experiencia museográfica rica. En el último nivel, el proyecto incluye una terraza longitudinal que ofrece vistas panorámicas de Lisboa, proporcionando un final simbólico al recorrido del museo. Esta terraza sirve también como un punto de contemplación que fortalece la relación entre el museo y su contexto urbano, permitiendo que los visitantes se conecten visualmente con la ciudad y el río. Para mejorar la sostenibilidad, la fachada está diseñada para optimizar la luz natural, reduciendo la necesidad de iluminación artificial en las áreas expositivas. Además, el edificio incorpora sistemas de control térmico pasivo, aprovechando las propiedades de los materiales para regular la temperatura, lo cual contribuye a reducir el consumo energético. Los niveles subterráneos albergan las áreas técnicas y de almacenamiento, garantizando una gestión eficiente de las colecciones y de los servicios operativos. Esta organización permite separar las funciones técnicas del espacio público, manteniendo una distribución funcional que facilita el trabajo del personal sin interferir en la experiencia del visitante. En el nivel de acceso, el vestíbulo cuenta con una tienda y una cafetería con acceso directo al jardín de esculturas, integrando estos espacios en la vida cotidiana del barrio y permitiendo que funcionen de manera independiente. Las salas de exposiciones temporales están diseñadas con iluminación ajustable y elementos móviles, lo que facilita una disposición flexible y versátil que se adapta a diferentes formatos de exposición, promoviendo una experiencia interactiva y dinámica. El MNAC también destaca por su compromiso con la accesibilidad. Todas las áreas están adaptadas para personas con movilidad reducida, con rampas, ascensores y señalización adecuada, garantizando una experiencia inclusiva y accesible para todos los visitantes. Además, el proyecto incorpora un espacio de restauración visible al público, donde los visitantes pueden observar el proceso de conservación de las obras, añadiendo un valor educativo y de transparencia a la visita. El nuevo diseño del MNAC representa un compromiso con la sostenibilidad y la integración cultural en el Chiado. Este enfoque arquitectónico permite que el museo se mantenga fiel a su legado patrimonial al tiempo que adopta una visión de innovación y apertura hacia el futuro. Con una estructura que combina funcionalidad, accesibilidad e integración urbana, el MNAC se convierte en un espacio donde el arte contemporáneo y la arquitectura dialogan con la comunidad y el contexto urbano. Este proyecto asegura que el MNAC continúe evolucionando en armonía con la ciudad, consolidándose como un centro cultural de referencia donde el arte y la arquitectura se fusionan para enriquecer la experiencia de cada visitante.
