Arenas Basabe Palacios arquitectos . photos: © Miguel de Guzmán+Rocio Romero (imagen subliminal)
The residential project, with associated sports facilities, is located on an irregularly shaped plot with a significant slope. In order to respect the small scale of a low-density residential area, a dual strategy is proposed: to combine various functions (housing, sports center, common spaces, parking, etc.) under a single structure while fragmenting the whole, in dialogue with the surrounding single-family homes.
The result is a catalog of similar-similar pieces, which slide into each other to complete a fragmented volume that adapts to the shape and topography of the site. Belonging all to the same family, each piece is unique in its morphology: depth, height and length are specifically defined in response to the program of its interior, according to its connection with the open space, accessibility and privacy.
The materiality unifies the diversity of the complex, highlighting the contrast between the light zinc skin that covers the roof and street facade in contrast to the massive white perforated walls of the transversal facades.
The sliding of parts causes a system of bands that structures the free space where intermediate places appear that enrich the exterior-interior relationship: access thresholds, terraces, patios, etc. The intervention is completed with an entrance plaza with a more urban character towards the street and a more natural condition in the perimeter, organizing a wooded and floral garden that surrounds the complex.
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Proyecto Ü
Tres viviendas unifamiliares con dotación deportiva asociada en La Marazuela. Las Rozas de Madrid, 2020.
Arquitectos: Arenas Basabe Palacios arquitectos
Arquitecto Técnico: Enrique Maroto
Constructora: Ecay construcciones
Localización: Camino del Pardo, 7-9. La Marazuela, Las Rozas de Madrid.
Superficie: 2200 m2
Fotografía: Imagen Subliminal
El proyecto residencial, con dotación deportiva asociada, se sitúa en una parcela de forma irregular con una importante pendiente. Para respetar la pequeña escala de un ámbito residencial de baja densidad, se propone una estrategia dual: aunar bajo una misma estructura diversas funciones (viviendas, centro deportivo, espacios comunes, aparcamiento, etc.) y fragmentar a su vez el conjunto, en diálogo con las viviendas unifamiliares de su entorno. El resultado es un catálogo de piezas similares-disimilares, que deslizan entre sí para completar un volumen fragmentado que se adapta a la forma y topografía del lugar. Cada pieza es única en su morfología, perteneciendo todas a la misma familia, fondo, alto y largo se definen específicamente respondiendo al programa de su interior, según su vinculación con el espacio libre, accesibilidad y privacidad. La materialidad unifica la diversidad del conjunto, destacando el contraste entre la ligera piel de zinc estriada que recubre los paños de cubierta y fachada a calle en contraposición con los masivos muros blancos horadados de las fachadas transversales. El deslizamiento de piezas provoca un sistema de bandas que estructura el espacio libre donde aparecen lugares intermedios que enriquecen la relación exterior-interior: umbrales de acceso, terrazas en altura, patios estanciales, etc. La intervención se completa con una plaza de entrada de carácter más urbano hacia la calle y una condición más natural en el perímetro, organizando un jardín arbolado y floral que envuelve el conjunto.
