Irisarri + Piñera . photos: © Héctor Santos Díez . + archdaily
The project seeks a balance between a joint organization, and not give up the presence of clustered buildings, between get a sense of unitary piece, and the inherited. Interlacing three types of interventions; rehabilitation, restructuring for new uses, and the partial replacement, selecting items of value and traces of the place.
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A courtyard sum of the existing ones, organizes and provides quality as well as a reference section. This allows with one unevenness to solve different levels of buildings, maintaining the stone walls and functional their holes.
A “generic” and flexible spatial distribution, overturn in “cross” mode the street and courtyard,and only files and services are closed space.
The courtyard connects the building with the surrounding streets at various levels. The main entrance, is where the new and old architecture join. It’s where public scale appears as a double-height space that gives presence to the common courtyard from the street, recovering for it the idea of a court access gap between the city and the building.
We support on the strengthened walls. Preserving the structural typology and scale, horizontal concrete structure assumes the strong overloads of the program. Each element works for what it was designed, without overlapping structures.
The gaps with traditional windows to the outside, contrast to hidden mark carpentry glass, marks the thickness of the wall, showing both the passing of time as a change of use.
The preserved facades, are covered behind the gaps, to maximize light. In the courtyard, the gallery with protecting mobile wooden slats, optimizes space and lighting-ventilation.
The unit deck is supported by the party walls, and is seen forming a rich space of variable section.
El proyecto busca el equilibrio entre una organización conjunta y no renunciar a la presencia de los edificios agrupados, entre conseguir una percepción de pieza unitaria y lo heredado. Entrelazando tres tipos de intervenciones; rehabilitación, reestructuración para nuevos usos, y la sustitución parcial, seleccionando los elementos de valor y las trazas del lugar. Un patio suma de los existentes organiza y aporta cualidad y calidad, así como referencia en sección. Esto permite resolver con un solo desnivel las distintas cotas de los edificios, manteniendo los muros, así como funcionales sus huecos, Una distribución espacial “genérica” flexible, volcada de modo “cruzado”, a la calle y al patio, donde solo se cierran archivos y servicios. El patio conecta el edificio con las calles circundantes en sus diversos niveles. El acceso principal, es donde se encuentran la nueva y la vieja arquitectura. Es el lugar donde aparece la escala pública en forma de un espacio de doble altura que da presencia al patio común desde la calle, recuperando para ello la idea de un atrio de acceso, espacio intermedio entre la ciudad y el edificio Nos apoyamos sobre los muros, saneados y reforzados. Conservando la tipología estructural y escala, la estructura horizontal de hormigón asume las fuertes sobrecargas del programa. Cada elemento funciona para aquello que fue diseñado, sin estructuras superpuestas. Los huecos con ventanas tradicionales a exterior, en contraste con vidrios de carpintería oculta marcan el espesor del muro, evidenciando tanto el paso del tiempo como un cambio de uso. Las fachadas conservadas, se trasdosan en los huecos, para maximizar la luz. En el patio, la galería con protección de lamas de madera móvil, optimiza el espacio y la iluminación-ventilación. La cubierta unitaria se apoya en los muros medianeros, y queda vista conformando un rico espacio de sección variable.
