La obra de Gonçalo Sena (Cascais, Portugal, 1984) propone la conversión de la pura energía en la materialización de un acto. Sus proyectos siempre se sitúan al filo de la navaja; construye dualidades en un contexto a medio camino entre la escultura y la arquitectura, entre los procesos físicos y los mentales. Construcción, huella y memoria, cubrir y des-cubrir, revestir y revelar son sus procedimientos reversibles y versátiles; contextos reales, lugares, donde sobrevuelan referencias a los Non-Sites de Robert Smithson o a algunas de las ideas de Michelangelo Pistoletto. Métodos, ritos y acontecimientos que cuestionan el papel de la escultura como proceso de preparación, estudio y realización. Conclusiones abiertas en las que Albert Speer, Martin Heidegger o Rainer Maria Rilke sirven de apoyo para trazar nuevas trayectorias y distancias que miden desde un punto de vista arqueológico las profundidades de la práctica artística.
Galería Heinrich Ehrhardt
0
Gonçalo Sena
Nada cresce . 2015