BAAS arquitectura
Tres volúmenes ligeros en un paisaje único.
Una parcela estrecha y alargada en primera línea del mar y rodeada de un entorno natural excepcional. Una volumetría fragmentada que adapta su escala a las edificaciones aisladas de su entorno. Tres cuerpos de vidrio envueltos por lamas de madera que quieren garantizar transparencia, control solar y privacidad, mostrando siempre al mar.
La planta baja se destina al programa de uso más público, la recepción, restaurante y tienda y de nuevo la cubierta será un espacio colectivo y lúdico alrededor de la piscina. En el medio, entre las dos plantas, se ubican las habitaciones.
Las habitaciones permiten abrirse completamente el pasillo y así fomentar la transparencia y la socialización de los huéspedes, tal y como se hacía tradicionalmente en los hostales. Las duchas se ubican en la terraza aprovechando la luz natural.
Se propone una construcción tradicional de muros de carga cerámicos, forjados de viguetas de hormigón y bovedillas cerámicas, todo pintado en blanco en busca de una atmósfera natural mediterránea.
Arquitectura
Jordi Badia
Jefe de proyecto
Jordi Framis
Colaboradores
Eva Damiá, Enric Navarro, Àlex Clarà, Mercè Lorente, Laura Sanchís, Albert Casas, Oscar Guillen, Pere Molas, Aleix Turon
Imágenes
Andreu Taberner